Como viene siendo ya costumbre, a parte de buenos vinos, no
pueden faltar buenas viandas en nuestra mesa. Esta noche tuvimos la oportunidad
de degustar unos buenos callos toledanos, un pisto con carne al estilo María y
chorizo curado de sobrasada.
En honor a la verdad diré que estos platos desvirtuaron
en alguna medida la cata de los vinos. ¡Pero que bueno estaba todo!y que manera
de comer.
MONASTERIO DE LAS VIÑAS RESERVA 2006
D.O.CARIÑENA
70% GARNACHA, 20% TEMPRANILLO, 10% CARIÑENA
Este Cariñena destaca por tener una capa fina bien definida,
una lágrima ancha y espesa. El color es muy vivo y no nos de idea de estar ante
un reserva.
Los aromas son muy sutiles a frutas y vainilla, detrás de
estos algo de madera y ceniza. Si lo dejamos que se oxigene bien, aparece un
aroma a pasas muy agradable
En la boca es muy equilibrado, algo alcohólico pero no
molesta. Sus taninos nada ásperos dan paso a un retrogusto de madera suave que
no cansa y a alguna especia, como la pimienta.
Es un vino equilibrado con poca evolución.
LUZ MILLAR ROBLE 2011
D.O. RIBERA DEL DUERO
TEMPRANILLO
Es un vino muy sabroso a frutas y madera en equilibrio. Podemos apreciar la mora y la ciruela con un poco de pimienta. Tiene un color intenso.
Sorprende por lo bien que entra a pesar de la viveza e sus
taninos. Tiene un final con pocos cambios aun
que quizás decae un poco. Maridó
perfectamente con los platos sabrosos que degustamos.
Mencía.
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