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jueves, 12 de julio de 2012

Jubilator, el ultimo pensionista vivo.


   Año 2053. Hace 50 años nadie hubiera apostado por mi, pero contra todo pronóstico y yo diría que milagrosamente, soy el último del club amalauva que queda con vida. Mi nombre no importa, la verdad
es que podría haber sido cualquiera, pero he sido yo el que ha sobrevivido a tanta vorágine, niño. Lo cierto es que a lo largo de estos años no he participado mucho en el blog, a lo sumo, un par de ocasiones y puede que tire por lo alto. Sin embargo he querido publicar este post por dos razones: la primera y mas importante por la relevancia del tema y la segunda como homenaje póstumo a los compañeros del club que nunca dejaron  de animarme para que colaborara en el blog. Va por ellos.

   Hace ya un par de semanas que J.J, el último pensionista vivo de este país, esto es , el único español que recibe la  pensión de jubilación a fin de mes, fue enviado a cumplir una peligrosa misión. Desde entonces, el desanimo y la desesperanza entre la población ha ido en aumento. No hay día en el que los ciudadanos que tienen entre 67 y 70 años no miren su cuenta corriente en busca del tan esperado ingreso, lo que indicaría además que J.J ha tenido éxito.

   Todo empezó hace unos veinte años, cuando inesperadamente, los trabajadores que se jubilaban no recibían la merecida retribución a toda una vida de trabajo. Cundieron las protestas, las movilizaciones, las muestras de rechazo ante la situación, pero todo fue en vano. Poco a poco, resignados, los nuevos pensionistas  tuvieron que aceptar la situación: una jubilación de dos velocidades, la de, como media, 1200 euros al mes, y la de, como media, 0 euros al mes. A medida que morían los que cobraban pensión iban quedando menos, hasta que hace solo unos días se supo que J.J era el último de ellos, el último de una estirpe de dioses.

   En estos últimos 50 años,en este país,  han cambiado muchas cosas y otras han permanecido invariables. Entre estas últimas, se encuentran la investigación y la ciencia. Por ellas no pasa el tiempo. Su situación es la misma que en el periodo de la Ilustración, allá por el siglo XVIII. Sin embargo, y gracias a que existe el azar y a que todavía no lo controlan los alemanes, becarios españoles del CSIC llevaron a cabo una serie de experimentos que una vez realizado el calculo de errores, calibrado  de nuevo los instrumentos, sometidos los resultados al criterio de falsación de Poper, excluidos los posibles efectos del hachís y del tinto de verano sobre la prueba, arrojaron, sin ningún  lugar a dudas, la demostración fehaciente de que era posible viajar en el tiempo. ¿Cómo?   De la manera más fácil. Bombardeando  nueces de Macadamia con haces de una partícula subatómica inservible y  prácticamente olvidada desde que se descubrió hace 50 años, el bosón de Higgs. Del choque se produce una sustancia pegajosa que convenientemente compactada e introducida por el recto permite a quien así la alberga trasladarse a la época que elija.

   Esto fue lo que se hizo con J.J. el último pensionista vivo. Fecha elegida: el 11 de julio de 2012. ¿Por qué? Nuestros economistas están convencidos de que algo ocurrió en el congreso aquel día que impidió que se cobraran las pensiones de los nuevos jubilados hace 20 años. Entonces no teníamos la tecnología para enviar un hombre al pasado pero ahora si . La misión de J.J, consiste en trasladarse hasta esa fecha, introducirse en el congreso y cambiar los papeles en los que  un tal Rajoy lleva apuntadas una serie de medidas cuya aprobación aquel día supuso nuestra actual desgracia.

   Aunque la degeneración moral de nuestra época va en aumento, no crean que somos unos desalmados que embarcan a un pobre viejo en una aventura como esta. La razón es estrictamente económica. No tenemos fondos y ante cualquier eventualidad que impidiera traer de vuelta a quien mandáramos sabíamos por los registros de las crónicas antiguas que existían unos objetos , que a modo de santo grial, concedían  todo lo que un hombre pudiera necesitar: la tarjeta de la Seguridad Social, la tarjeta del Inserso y el abono transporte para mayores de 65 años. En nuestro mundo, solo J.J  las tenia, de modo que si quedara atrapado en 2012 lograría sobrevivir , al contrario que cualquiera de nosotros al que tratarían como un sin papeles.

   ¿Qué contienen los papeles que lleva J.J y que Rajoy debería leer ante el congreso si la misión tiene éxito? Un solo párrafo que resume el sentir general de esta época: “ Señorías, me dirijo a ustedes con la intención de dejar clara una cosa y nada más: somos unos hijos de perra ladrones que únicamente miramos por nuestro bienestar. Merecemos ser sepultados por toneladas de mierda y que sean  las futuras generaciones quienes la viertan sobre nosotros. Gracias.”

   Seguimos sin noticias de J.J, el ultimo pensionista vivo.

                                                                                                  Merlot

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